viernes, 22 de abril de 2011

reflexión de viernes santo (nada que ver con semana santa)

Bueno, y ya comienza el viernes santo, ya queda menos para que terminen estas "vacaciones". Pronto volveré a sevilla, a la rutina de todos los días y a poder dejar de pensar durante horas. Aunque lo que más quiero es irme a tomar una cerveza, un café, un algo con alguien y poder charlar, porque tanto estarme callada y sólo contar las cosas por aquí me está volviendo loca. Necesito alguien que me escuche cara a cara, necesito a alguien que haga de amigo durante una hora, 30 minutos, algo....
La gente me dice que es que dependo de las otras personas y que eso no puede ser así, pero ¿quienes dicen eso? esas personas que cuentan con alguien con quien hablar cada vez que se encuentran mal, una persona que está en los buenos y malos momentos, ya sea pareja, amigo o grupo de amigos. Y me pregunto, si dices que no es necesario, ¿por qué tú te rodeas de gente? me gustaría a más de uno en mi situación.
Pero bueno, como no le deseo el mal a nadie, lo único que me toca ahora es buscar, buscar un círculo donde me encuentre a gusto y me acepten tal y como soy. Se que tengo mi mal genio, que soy un poco rarita y que a veces me enfado por nada entre otras cosas, pero bueno... no sé, alguien en el mundo habrá que me pueda aceptar tal y como soy. Por que tengo la mala suerte de que cuando alguien deja de hablarme radicalmente (cosa que me pasa habitualmente en los últimos meses) nunca me dicen que es lo que les molesta de mi... así que no se que cambiar para que no me vuelva a pasar.
Así que nada, a seguir buscando, bien por Sevilla, bien cambiando de ciudad... tenía intención de quedarme un añito más por sevilla, pero con los últimos acontecimientos no sé muy bien que hacer... así que bueno, poco a poco hay que seguir adelante y a ver si puedo dejar de fingir la sonrisa y poder sonreir verdaderamente, volver a reir ^_^

jueves, 21 de abril de 2011

Reflexión de jueves santo (nada que ver con semana santa)

No tengo palabras para definir como me siento, sin embargo tengo ganas de escribir. Siento que toda esta pequeña "vida" que me llevo formando hace unos meses vuelve a desvoronarse. Siento que no encajo en ningún sitio, ya no sé como soy, ya no sé como me siente, ya no sé nada de mi misma. Cuando voy levantando cabeza todo vuelve a derrumbarse de nuevo.
Siento que no tengo nadie con quien hablar... llevo dos días fingiendo estar bien, a quien le intento contar que me pasa, ni me hace caso... necesito hablar con alguien, no pido nada más, necesito un amigo.
Es muy fuerte que esté quedando con un chico que me gusta. Tras una larga conversación el lunes por la noche me dice puede haber posibilidades entre nosotros. Me hizo muy feliz en ese momento, además, sus actos no decían lo contrario. Pero todo se desvorona el martes. Lo llamo para quedar por la noche y me dice que sí. Llego, cenamos y tal y cuando nos vamos a la cama, a eso de las 11.30 de la noche, me dice que no quiere quedar más conmigo. Pero así, sin más explicaciones y sin nada. Yo me quedé helada. Había ido a su casa lloviendo y con la maleta a cuestas, porque al día siguiente me venía al pueblo. Me vi, a las 12.30 de la noche, intentando pillar un taxi, lloviendo y no en uno de los mejores barrios de sevilla. Menos mal que al menos el chaval se dignó el acompañarme a coger el taxi y a dejarme dinero para ello.
Pues nada, desde entonces, se lo conté a un amigo via msn y estubimos hablando 5 minutos, luego todo se olvidó. He intentado hablar con alguien más, pero nada. Sigo con una sonrisa fingida, sigo pareciendo feliz.
En mi casa en el pueblo, tumbada en el sofá, hablando con gente que ni conozco y escribiendo en el blog. Esta es la semana santa que me espera.
Ya no volveré a tener sus besos, sus abrazos, nada... y lo peor de todo es que tengo que seguir viéndolo. El finde que viene lo veré y no sé cuando más, pero seguramente que nos cruzaremos más de una vez, porque una vez que he conseguido entrar en una asociación, no voy a dejarlo todo por él, porque tengo que seguir con mi vida, aunque me cueste mucho, pero poco a poco hay que ir superándolo, ya vendrán tiempos mejores, pero, ¿cuando?

domingo, 3 de abril de 2011

reflexión tras 41 horas sin estar con nadie

Y otra vez vuelvo a sentir ese vacío al que muchos llaman soledad. Vuelvo a tener las lágrimas a punto de salir, vuelvo a no tener ganas de nada.
Durante la semana no tengo tiempo para pensar, simulo que soy feliz, e incluso me lo creo, pero cuando llega el temido fin de semana todo se vuelve gris. El pensar que no tienes a nadie a quien llamar para salir, el odiarte a ti misma, el sentir que nadie te quiere, que nadie se preocupa por ti. Así es como me siento, siento que no soy nada para nadie, que soy invisible para el mundo, que a nadie le importa lo que sienta, como me encuentre.
Y lo más dificil de todo es que me encuentro rodeada de gente, pero me siento sola. En estos momentos sólo tengo ganas de desaparecer y dejar de existir. Estoy deseando que llegue mañana, para al menos hacer cosas, ver a gente, montarme de nuevo mi mundo de fantasía, donde vivo, donde intento ser feliz, porque sin ese mundo, en el que creo que le importo a alguien, no podría sobrevivir ni un día más. Porque necesito sentirme querida, porque de vez en cuando necesito un abrazo, un beso, una muestra de cariño. Por que con sólo eso soy feliz, pero esos simples gestos son difíciles de encontrar, porque me siento desdichada. Porque siento que nadie me quiere...